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lunes, 29 de abril de 2019

MUJERES QUE CORREN CON LOS LOBOS

DEL MIEDO AL AMOR...
Clarissa Pinkola Estes
Cada uno de los miembros de la pareja ve la frágil y herida parte oculta del otro o ve al otro como algo que – no es precisamente un trofeo -. Este momento parece un momento espantoso y, sin embargo, es el momento privilegiado en que existe una auténtica oportunidad de dar muestras de valentía y conocer el Amor.
Amar significa permanecer al lado de alguien. Significa salir de un mundo de fantasía y entrar en un mundo en el que es posible el Amor duradero, cara a cara, hueso a hueso, un amor hecho de afecto. Amar significa quedarse cuando todas las células gritan: “Echa a correr”.
Para Amar de verdad hay que ser un héroe o una heroina capaz de superar el propio temor. El momento decisivo se produce cuando uno se atreve a Amar “a pesar de”, a pesar de mis dudas, a pesar de mi inquietud, a pesar de las heridas que haya sufrido anteriormente, a pesar de mi temor a lo desconocido.
A veces no existen palabras capaces de ayudarme a ser valiente. A veces hay que lanzarse sin más, tiene que haber en la vida de un hombre o de una mujer algún momento en que éste se deje llevar por el Amor, en que le dé más miedo quedar atrapado en el reseco y agrietado lecho fluvial de la Psique que adentrarse en un exuberante pero inexplorado territorio.
Todos hemos cometido el error de pensar que otra persona nos puede curar, emocionar o llenar. Se tarda mucho tiempo en averiguar que no es así, sobre todo porque proyectamos la herida fuera de nosotros y responsabilizamos al otro, en lugar de mirar nuestra responsabilidad, para tener el poder de curarla dentro de nosotros.
"Mujeres que corren con los lobos"

miércoles, 24 de abril de 2019

CIUTAT D´ELLES

https://www.diariodemallorca.es/palma/2019/04/21/grupo-mujeres-rescata-ciutat-delles/1410876.html?fbclid=IwAR15yalj_bJLYr-oDlKJGsQ9kSjd7c1x80E9kWmN5IBTDrHLZJbv8TD9Bq4


Un grupo de mujeres rescata Ciutat d'Elles, el proyecto de ecoaldea para envejecer activamente

En Palma, más de 12.000 mujeres mayores de 65 años viven solas - Las impulsoras de esta propuesta que data de 2003 plantean materializarla en Son Busquets - Se trata de un espacio en que cada usuaria tendría un apartamento propio, y compartiría con otras huerto y zonas comunes

20.04.2019 | 23:57
Malén Cirerol y Ángeles Martínez, dos de las activistas que apuestan por la ecoaldea Ciutat d'Elles. 
"En el futuro que nos aguarda está en cuestión el sentido de nuestra vida; no sabemos quiénes somos si ignoramos lo que seremos: reconozcámonos en ese viejo, en esa vieja", escribió Simone de Beauvoir en su ensayo La vejez.
La longevidad es cosa de mujeres en un porcentaje elevado. En Palma, las cifras son elocuentes y dan fe de esa diferencia: más de 12.000 mujeres mayores de 65 años viven solas. En la franja de 75 años hacia arriba, un 76 por cien son mujeres. De las 17.187 personas que viven solas en Palma, 12.196 son mujeres. Las cifras corresponden a 2017 y han sido facilitadas por Cort cuando inició la elaboración del Plan de Igualdad.
Como en tantas etapas el cómo es lo importante. En una sociedad occidental envejecida a marchas forzadas, hay colectivos que proponen otra manera de vivir la última etapa de la vida, probablemente la más difícil.
En Palma el ejemplo lo encontramos en el proyecto Ciutat d'Elles que, creado en 2003, ya peina canas.
Malén Cirerol, Leonor Taboada, Ángeles Martínez, Eve de Castro y Rosa Masdeu son algunas de las que siguen adelante a pesar de sumar casi dos décadas "de altibajos". Con todo, siguen firmes en su idea madre: "¿Cómo queremos vivir hasta la muerte? ¡Vivas y contentas!"
Ángeles Martínez apunta el dato: "¡Igual que fuimos pioneras en el feminismo, lo fuimos con esta idea de ecoaldea para mujeres mayores! Hoy se habla de vivienda colaborativa pero en aquellos años, en España, apenas se escuchaba", añade.
Malén Cirerol apunta: "Desde el principio vimos que era un proyecto utópico y complicadoporque apostamos por un envejecimiento activo basado en la sostenibilidad social, económica y medioambiental en el que se impliquen las instituciones".
En Europa existe un ejemplo, las babayagas, un grupo de mujeres feministas que tras 15 años de lucha consiguieron que el ayuntamiento de París les cediera viviendas de 40 metros cuadrados por las que pagan 320 euros al mes.

Son Busquets

Ahora la esperanza está puesta en Son Busquets. Ellas presentaron su proyecto piloto narrado como un cuento al certamen convocado por los Jóvenes Arquitectes de Mallorca.
"El espacio es perfecto pero hay que esperar la aprobación del PERI. Nos han apoyado todos, y también este Ayuntamiento, pero no sabemos si la 'siembra' de esta semilla vamos a poder recogerla porque el tiempo pasa? ¡Podríamos empezar por fases!", lanzan. No se rinden. "Somos feministas, activistas desde hace 40 años", recuerdan.
Otra posibilidad está en dos posesiones de Son Rapinya y La Vileta que se están deteriorando y son de propiedad municipal. "Arca nos apoya porque reformarlas para convertirlas en la Ciutat d'Elles evitaría su pérdida; incluso se podría rentabilizar alquilando a otras mujeres de otros lugares para estancias cortas", apunta Ángeles Martínez.
Ciutat d'Elles plantea un modelo distinto de envejecer, activo, entre mujeres, ecologista y bajo el paraguas de lo público. "Pensamos que debería integrarse en el ministerio de Asuntos Sociales. Si el Govern ha sido valiente en Medio Ambiente, deberían serlo en este tema".
No hay un estudio económico aunque sí apuestan porque las inquilinas de esta ecoaldea pública pagarían un alquiler social en torno a los 500 euros al mes.
Todas las mujeres tendrían un pequeño estudio de 40 metros cuadrados, con baño y una pequeña cocinita aunque la gran cocina estaría en una zona común, al igual que la sala polivalente. Fundamental, el huerto. Se quieren vivas, contentas y sanas.

"HUBIERA QUERIDO" ALEJANDRO JODOROWSKY

HBIERA QUERIDO


Hubiera querido acariciarte desde lejos con una pluma
Hubiera querido sentir el palpitar de tu carcomo un vuelo de pájaros
Hubiera querido penetrar en tu pasado murmurando frases que hacen llorar de placer a los muertos
Hubiera querido encantar a las fieras encontradas en tu corazón


Aquí estoy de regreso a tus visceras a tu piel a la corona impalpables que te ciñe la cabeza
Aquí estoy de regreso a tu mirada, hebra de luz eterna que entreteje a mi ser.

Al Jodoriwsky

A ti: A. B 

domingo, 21 de abril de 2019

PANCREAS Y MÁS


Segundo punto del canal de energía del Bazo – páncreas. Su nombre es Dadu 大都, lo podemos traducir como “Gran Capital o Ciudad Próspera”. Su nombre hace referencia a que es un centro importante para mejorar la energía del bazo -páncreas, algo así como el Centro de la prosperidad nutritiva. (Punto de tonificación).
Indicado para el sueño agitado, convulsiones infantiles, diarreas, vómitos, dolor sobre el estómago y el corazón, hinchazón abdominal, dolores óseos, trastornos de la memoria, diabetes, reumatismo del pie, lumbalgias. A nivel Psíquico está indicado para el exceso de preocupación / la persona no para de pensar.
*Masajear el punto B2 con los dedos pulgares en los dos pies aplicando ligera presión (27 rotaciones en sentido horario).
CURSOS A DISTANCIA
*Informes por inbox o escribir al mail : medicinachinaperu@gmail.com

jueves, 18 de abril de 2019

LAS GUERRAS, LA SIN RAZON,

Las tres rosas del salitre (*) 
Cuando sacaron de su casa a Julia Lafora, la maestra de Triana, era de madrugada, apenas tuvo tiempo de vestirse, se quitó el camisón en presencia de los falangistas que la custodiaban, para ponerse el vestido negro de luto por su marido fusilado dos días antes. Afuera, dentro del lujoso vehículo donde la introdujeron, dos mujeres más que lloraban, ambas con la cara ensangrentada por los golpes de los requetés.
El auto enfiló directo hacia el sureste de la isla, entrando por una carretera de tierra hacia la Playa de Melenara en Telde, allí esperaban varios miembros de la guardia civil y del ejército de tierra, algunas caras conocidas de la oligarquía isleña, un empresario tabaquero, el hijo del conde, un terrateniente del sur de origen inglés, propietario de gran parte de la industria del tomate.
Las mujeres fueron sacadas a la fuerza de los coches, Julia fue la última, las dos chicas era Josefa Rodríguez del barrio de La Isleta, 25 años,sindicalista tabaquera de la CNT, Dolores Zapata, 22 años, madrileña y trabajadora contratada en la Federación Obrera, se encargaba de la tramitación de las denuncias contra los empresarios por abusos y explotación laboral.
Ya junto a la explanada previa a la playa los hombres con correajes empezaron a insultarlas, a llamarlas “putas”, “asquerosas”, “tortilleras”, “guarras”… Julia solo pensaba en su marido asesinado, su mente no era capaz de asimilar aquel momento tan terrible, todo se le iba en el recuerdo de los buenos momentos en la consulta del “médico de los pobres” que tanto amaba, el joven licenciado en Madrid, que había dedicado gran parte de su carrera a atender en su humilde despacho a la gente necesitada sin cobrarles nada “¿Quizá ese fue el motivo de su condena a muerte?” se preguntaba, no entendía tanta crueldad, ese odio atávico contra ellas, contra todo lo que representaban al ser mujeres formadas, comprometidas, cultas, antifascistas, republicanas y defensoras de los derechos de su género, de su clase.
Un guardia civil con un parche en el ojo se acercó a las mujeres y les rompió los vestidos a la altura del pecho, quedaron semi desnudas entre los gritos de unos 40 hombres ebrios y desatados. El seminarista Juan José Samsó, se encargó de raparlas con unas tijeras una a una, sus cabelleras caían al suelo entre las burlas del grupo de fascistas: “¡Follatelas Cabrera!”, dijo uno de los requetés, el más joven del grupo, el viejo capataz Froilán Cabrera no respondió, prefirió golpear a Dolores con la culata del fusil, que cayó al suelo semiinconsciente, subirle la falda a Josefa para burla general de la soldadesca.
Las mujeres arrodilladas, abrazadas en aquel suelo repleto de piedras y arena, humilladas, temblando de miedo, protegiéndose unas a otras con sus cuerpos de las agresiones verbales, de los escupitajos de algunos, de las patadas y golpes de aquellas caras conocidas, de hombres que habían visto alguna vez en las calles, en sus trabajos, en los bailes y fiestas de los pueblos, varones de los que nunca imaginarían un comportamiento tan atroz, tan violento contra mujeres que no habían cometido ningún delito, solo defender la libertad, la democracia, un mundo mejor para el pueblo canario, para la gente más desfavorecida de unas islas sometidas a la esclavitud, a los caprichos del caciquismo ancestral, el que junto a la Iglesia Católica, durante cientos de años, había sometido a todo un pueblo a vejaciones y abusos indescriptibles.
Después de varias horas algunos soldados por orden de capitán Morera rodearon a las mujeres que ya casi desnudas iban a ser violadas por todo el grupo de hombres, los vecinos se habían soliviantado por el escándalo, había gente asomada en las lomas vecinas, luces encendidas en los pequeños poblados de apareceros, los organizadores del linchamiento múltiple decidieron por seguridad que había que llevarse de allí a las tres mujeres. 
Las metieron en uno de los coches ante la indignación de la enfervorizada multitud de fascistas, varios mandos de la guardia civil discutían a gritos medio borrachos con los dirigentes de Falange, en medio del caos las sacaron hacia la carretera del sur a un destino desconocido, las mujeres no se habían hablado entre ellas hasta ese momento de silencio entre el ruido del viejo motor, al oído, Julia, le dio a Josefa: “Mi niña nos sacan del infierno, pero nos llevan a otro. No digas nada te hagan lo que te haga, no reveles los nombres, ni las direcciones de los camaradas”.
Las tres mujeres tuvieron un final misterioso, no se supo más de ellas, aún se les recuerda en la memoria colectiva de la lucha por la justicia, la ternura y la dignidad. En el exilio de la Francia ocupada por los nazis, Roberto Macías, nombraba el caso de las “Tres rosas del mar” en las reuniones clandestinas de la resistencia en los pisos francos de París. Era hermano de Dolores, salió de Gran Canaria en agosto del 36 hacia África en un barco de pesca, nunca pudo olvidar aquellos sucesos ocultos de forma premeditada hasta la actualidad, cada 19 de septiembre antes de morir se iba con sus hijas y nietos esa noche a la playa de Melenara, allí pasaban un rato de charla escuchando como rompían las olas, mientras echaba al mar en silencio las tres flores rojas. 
(*) Relato publicado en el libro "Tormenta en la memoria" de Francisco González Tejera 

miércoles, 17 de abril de 2019

CONFIA

TRUCO
No temas pon la otra mejilla
que golpeo con besos
dejame que te haga un truco
soy el mago del amor
Tu atame de pies y manos
que en desatarme soy experto
Y dejame que te hipnótice
Con el tic-tac del corazón
Y deja que te cuente
El cuento de los sentimientos
deja q practique con tu cuerpo
El lenguaje d las manos
No le tengas miedo al frío
planta cara y al invierno
Subete a mi barca desnuda
Que mi cuerpo es verano
Vamos a jugar a ese cuento
que te beso y despiertas
vamos a contradecir al mundo
hagamos lo claro oscuro
se dice que en el interior de la persona
esta la belleza
pues vamos a jugar a las prendas
Empezaremos desnudos
EL BARRIO
Trucos