Vistas de página en total

viernes, 17 de julio de 2015

IRA

Herramientas para apagar las llamas
El Buda nos dio unas herramientas muy eficaces para apagar el fuego que hay en nuestro interior: el método de respirar y de andar de manera consciente, el método de abrazar nuestra ira y de observar profundamente la naturaleza de nuestras percepciones, y el método de observar a fondo a los demás para comprender que también sufren mucho y necesitan nuestra ayuda. Estos métodos son muy prácticos y proceden directamente del Buda. Inspirar de manera consciente es saber que el aire está entrando en tu cuerpo, y exhalar de manera consciente es saber que tu cuerpo está cambiando el aire. Así estás en contacto con el aire y con tu cuerpo, y como tu mente está atenta a la respiración, también estás en contacto con ella; tal como es. Sólo necesitas una respiración consciente para volver a entrar en contacto contigo mismo y con el mundo que te rodea, y tres respiraciones conscientes para mantener este contacto. Siempre que no estás de pie, sentado o tendido, estás yendo a alguna parte. Pero ¿adónde vas? Tú ya has llegado. Con cada paso, puedes llegar al momento presente, puedes entrar a la Tierra Pura, en el Reino de Dios. Cuando desde una punta de la habitación te dirijas a la otra, sé consciente del contacto que mantienen tus pies con el suelo y del contacto del aire mientras entra en tu cuerpo. Esto te ayudará a descubrir cuántos pasos puedes dar cómodamente durante una inspiración y durante una exhalación. Mientras inspires, di «inspirando», y mientras espires, di «espirando». De ese modo, estaráspracticando todo el día la meditación de caminar. Es una práctica que se puede hacer constantemente y que tiene, por tanto, el poder de transformar nuestra vida cotidiana. A mucha gente le gusta leer libros sobre las distintas tradiciones espirituales o sobre rituales, pero no desea practicar demasiado las enseñanzas que aparecen en ellos. Las enseñanzas pueden transformamos, al margen de la religión o la tradición espiritual a la que pertenezcamos, si estamos dispuestos a practicar. Nos transformará de ser un mar de fuego a un refrescante lago. Y entonces no sólo dejaremos de sufrir, sino que además nos convertiremos en una fuente de alegría y felicidad para todos los que nos rodean.
-Thich Nhat Hanh.
LA IRA El dominio del fuego interior

No hay comentarios:

Publicar un comentario