la foto de María Amparo Lamas Abella.
Amar, amando.
Venciéndose al abandono
...
del encanto de amar.
Amar, avanzando.
Peleando , sangrando.
Siempre amando.
Amar, arriesgando.
Aún con astillas clavadas,
que nos siguen arañando.
Amar, sin distancias.
A pesar de los cortafuegos que encogen
la llamarada del amor.
Amar, en tiempos embrollados.
Enmarañarnos a las sedas de la deliciosa fruta de la pasión.
Amar, con deseos fervientes de hacerlo.
Hacerlo con total devoción.
Emocionarnos en ese lio.
Contusionarnos, enroscarnos,
en la madeja sublime del amor.
Amar sin cantidad y sin mirar la edad.
Amar porque me sale de dentro.
Porque así lo siento.
Porque lo queremos tú y yo.
Amar al prójimo,
ese que está en el mundo,
aquel con él que ya eres dos.
Dos amando, son al final
un universo en rebelión.
Amar, viviendo.
Amar, sintiendo.
Amar en tiempos de hambre
y trágica desolación.
Siempre por siempre amando,
Hasta que nos llegue el final.
A pesar de ese suceso,
el amor seguirá amando en el más allá.
María Amparo Lamas Abella
Amar, amando.
Venciéndose al abandono
...
del encanto de amar.
Amar, avanzando.
Peleando , sangrando.
Siempre amando.
Amar, arriesgando.
Aún con astillas clavadas,
que nos siguen arañando.
Amar, sin distancias.
A pesar de los cortafuegos que encogen
la llamarada del amor.
Amar, en tiempos embrollados.
Enmarañarnos a las sedas de la deliciosa fruta de la pasión.
Amar, con deseos fervientes de hacerlo.
Hacerlo con total devoción.
Emocionarnos en ese lio.
Contusionarnos, enroscarnos,
en la madeja sublime del amor.
Amar sin cantidad y sin mirar la edad.
Amar porque me sale de dentro.
Porque así lo siento.
Porque lo queremos tú y yo.
Amar al prójimo,
ese que está en el mundo,
aquel con él que ya eres dos.
Dos amando, son al final
un universo en rebelión.
Amar, viviendo.
Amar, sintiendo.
Amar en tiempos de hambre
y trágica desolación.
Siempre por siempre amando,
Hasta que nos llegue el final.
A pesar de ese suceso,
el amor seguirá amando en el más allá.
María Amparo Lamas Abella
Amar, avanzando.
Peleando , sangrando.
Siempre amando.
Amar, arriesgando.
Aún con astillas clavadas,
que nos siguen arañando.
Amar, sin distancias.
A pesar de los cortafuegos que encogen
la llamarada del amor.
Amar, en tiempos embrollados.
Enmarañarnos a las sedas de la deliciosa fruta de la pasión.
Amar, con deseos fervientes de hacerlo.
Hacerlo con total devoción.
Emocionarnos en ese lio.
Contusionarnos, enroscarnos,
en la madeja sublime del amor.
Amar sin cantidad y sin mirar la edad.
Amar porque me sale de dentro.
Porque así lo siento.
Porque lo queremos tú y yo.
Amar al prójimo,
ese que está en el mundo,
aquel con él que ya eres dos.
Dos amando, son al final
un universo en rebelión.
Amar, viviendo.
Amar, sintiendo.
Amar en tiempos de hambre
y trágica desolación.
Siempre por siempre amando,
Hasta que nos llegue el final.
A pesar de ese suceso,
el amor seguirá amando en el más allá.
María Amparo Lamas Abella
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