Nunca he sido de regalos caros. Ni siquiera de regalos. Prefiero una nota perdida donde ponga " te quiero ". Encontrar debajo de la almohada el libro que quería. Una fotografía que diga: - ¿ Te acuerdas ? Fue genial. Una mirada que creen que no ves. Un abrazo donde te pierdes y no te querrías ir nunca. Un beso furtivo. Una tarde en cualquier sitio hablando de cualquier cosa. Una simple caminata bajo el sol de invierno, donde la vida huele. Huele a flores, a azahar, a jazmín. Eso si son regalos bonitos.
Esos que nos hacen las personas que queremos y da igual que no cuesten dinero porque son los mejores, los que se hacen porque eres importante para ellos. Porque quieres y te quieren. Porque si.
Victoria - Segunda estrella a la izquierda - Original
No hay comentarios:
Publicar un comentario